martes, 1 de septiembre de 2020





 

Moiras, Parcas, Lamias o Nornas son distintos nombres que han recibido a lo largo de la historia estos avatares del destino. En Sarovir se las conoce como Las Tres Suertes.


Las Tres Suertes están hechas del material de las leyendas. Son supersticiones. Son cuentos narrados a los niños en las noches de tormenta. Todo el mundo conoce a alguien que a su vez conoce a otro que, para gracia o desgracia, se cruzó con alguna de ellas.

Los habitantes mas viejos de Sarovir, sobre todo en las aldeas alejadas del gran burgo, susurran que estos espíritus renacen en la tierra de los vivos cada vez que la rueda del destino debe girar bruscamente. Dicen que las Tres Suertes se reencarnan en tres mujeres; una joven risueña, una dama de mediana edad y una vieja arrugada. Dicen que estas mujeres, desconocedoras de su verdadero poder y cometido, sienten la necesidad de encontrarse y que cuando por fin se reúnen, un gran cambio se produce.

Las viejas canciones cuentan que cuando La Gran Peste Verde asoló las calles de Sarovir, se las vió frente a la Puerta de Hierro de la muralla. Que La Vieja entró en la Casa del Conde Rufio la Noche de las Lágrimas Rojas y que un grupo de zagales apredrearon a tres mujeres el día antes de que el río Cantarín se desbordase, inundando y ahogando a la mitad de los habitantes de Aldeaseca.

Las Tres Suertes son parte del imaginario de Sarovir, representaciones de miedos y deseos. Cuentos de viejas.

Pero esta noche, tres mujeres de distintas edades se han puesto a andar con la necesidad de encontrar a sus hermanas y cumplir sus destinos.



Las Tres suertes fue mi primer proyecto para Spanishinq28. Inspirado por "Las parcas" de Goya. Fueron concebidas como PNJ (Personajes no jugadores). Personajes poderosos que si bien no protagonizarían las partidas, estarían presentes. 

A nivel de hobby cada una de ellas fue todo un reto; experimenté con un montón de materiales que no había usado antes como la gasa, el hilo o la arcilla. Y a nivel de pintura fueron mis primeros pasitos en paletas monocromáticas y muy texturizadas. 

La verdad es que fueron toda una aventura!!! Las tengo mucho cariño y estoy estoy muy orgullo de ellas.

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